Con el partido igualado a cuatro, Francisco engarzó un slider del zurdo Barret Browning en el octavo inning y depositó la pelota del otro lado de la verja del prado derecho.
El poderoso bateador le puso fin a una racha de 48 días sin jonronear, la más larga que ha tenido en el circuito local.
Browning transfirió luego al importado Alex Hassan, quien fue sustituido por el corredor emergente Yordany Ramírez.
Anderson Hernández lo llevó hasta el plato con un tripe por el right.
Del resto se encargó Asencio, quien retiró en fila india a Joaquín Arias, Francisco Peña y Omar Luna para anotarse su salvamento número 17 del año, dejando atrás el record de 16 impuesto por Ken Howell en la campaña de 1984-85.
Los Tigres (27-19) se colocaron a sólo medio juego del segundo lugar que ocupan las Águilas (27-18) y a uno de los punteros Leones del Escogido (28-18), que anoche cayeron 2-1 ante los Toros del Este.
Un sencillo productor de Andy Marte había puesto adelante a las Águilas 1-0 en la primera parte del cuarto contra Ramón Ortiz, que abrió por las Águilas.
Un cuadrangular de Ryan Holaday con dos en circulación ante Juan Nicasio, su segundo de tres carreras ante el equipo cibaeño en partidos seguidos, coronó un racimo de cuatro y dio ventaja 4-1 al Licey en el cierre de ese episodio.
Las Águilas igualaron las acciones en el octavo cuando Rubby de la Rosa, que reemplazó a Ortiz en el sexto, fue atacado con sencillo de Omar Luna y doblete de Rafael Ynoa.
De la Rosa fue reemplazado por Carlos Mármol, quien de inmediato perdió en bolas a Juan Carlos Pérez y se congestionaron las almohadillas.
Mármol ponchó al peligroso Héctor Luna con una bola rápida de 95 millas. No obstante, Zoilo Almonte empujó dos con tubey y Andy Marte otra, la del empate, con elevado de sacrificio al prado derecho.
Fue entonces, cuando los Tigres ripostaron con sus dos vueltas ganadoras. El partido lo ganó Atahualpa Severino (2-0) y perdió Browning (0-1).
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