FE..CULIACÁN -- Mario Valenzuela disparó par de vuelacercas y con un doblete
remolcador le dio la vuelta al marcador en la novena entrada, para que
los Algodoneros derrotaran el miércoles 6-4 a los Tomateros de Culiacán,
en un partido polémico que llevó a Guasave a su segunda final
consecutiva en la Liga Mexicana del Pacífico.
El encuentro, detenido por espacio de 30 minutos por una decisión
polémica de los umpires en contra de Algodoneros, se celebró ante cerca
de 17 mil aficionados en el Estadio General Ángel Flores, donde los
disturbios florecieron durante y tras la eliminación del equipo de casa
por segundo año al hilo en un sexto juego (4-2) y ante el mismo rival en
el mismo escenario.
Valenzuela y Jesús Emeterio López, séptimo y octavo en el orden al bate
de Algodoneros, fueron los héroes al empujar cinco de la seis
anotaciones y llevar a Guasave a la final por segunda campaña seguida
como equipo comodín, luego de pasar la primera ronda de playoffs como
mejor perdedor.
"Gracias a Dios pude jugar, el "Che" (Reyes, el manager) me dejó jugar
pese a no estar al 100 por las lesiones y pude ayudar a ganar al
equipo", dijo Valenzuela al final del juego.
La temporada de Guasave, subcampeón la campaña pasada, ha sido de
pesadilla y ensueño, pues hace dos meses tenían un pie fuera de
playoffs, al ligar 17 derrotas consecutivas que lo llevaron a terminar
en el último puesto en la primera vuelta con sólo tres puntos.
Sin embargo, la directiva contrató a Enrique "Che" Reyes como manager y
el equipo cambió completamente al terminar la segunda vuelta en el
primer lugar y pasar como quinto mejor a playoffs. En la repesca de
playoffs ganó dos partidos a Yaquis de Ciudad Obregón, que fueron
suficientes para seguir con vida.
Ahora, los Algodoneros jugarán la segunda final consecutiva ante los
mismos Yaquis, el equipo que la campaña pasada les ganó la corona en
siete encuentros. Guasave busca hacer historia con su primer título en
40 años, pues no ganan desde la temporada 1971-72.
Los Algodoneros se vieron abajo en la pizarra en par de ocasiones, pues
el equipo de casa fabricó una carrera ante Walter Silva en el tercer
episodio, en que un mal corrido de bases les privó de una más.
El jugador de los Yankees de Nueva York, Ramiro Peña, inició el tercer
inning con sencillo y llegó a segunda con toque de sacrificio de
Jonathan Aceves, para enseguida anotar con sencillo de Ben Guez. Maxwell
León siguió con un largo doblete entre jardín derecho y central, pero
Guez juzgó mal el batazo y emprendió la huída a home un poco tarde para
ser puesto out.
En la sexta, los visitantes le dieron la vuelta al marcador con jonrones
consecutivos, en pitcheadas seguídas, frente al abridor Matt Buschmann.
En la parte baja de la entrada, con un out, Tomateros embasó a Jeff
Frazier con pasaporte y ensegudia Cory Aldridge pegó un elevado profundo
entre jardín izquierdo y central que Leo Heras le llegó muy bien.
Sin embargo, Heras perdió la bola cuando bajaba el guante aparentemente
para tomar la bola, pero se le cayó y el umpire del jardín derecho,
Rafael Calderón, decretó que la pelota estaba en juego y los corredores
quedaron en primera y segunda.
Algodoneros siguió la jugada y al ver que Frazier estaba en segunda, de
inmediato buscaron sacaron en primera y el umpire Humberto Saiz decretó
el out, lo que daba un doble play y la terminación de la entrada.
Pero el manager tomatero, Alfonso Jiménez, entró a pedir explicaciones y
tras una reunión entre los umpires de base y jardines, se revirtió a
quieto ambos corredores, lo que causó la molestia del timonel de
Algodoneros, Enrique "Che" Reyes, quien mantuvo a su equipo en la caseta
por 30 minutos.
El anotador oficial Luis Alfonso Félix dio hit al batazo, pese a que
Heras ya tenía en el radar la bola y no era una jugada de mucha
dificultad.
Tras salir al terreno, Adrián Ramírez entró al relevo de Silva y ponchó a
Luis Alfonso Cruz, pero Refugio Cervantes le disparó jonrón por el
prado derecho para poner el juego 4-2. Después el coach Abelardo Vega
entregó al umpire de home, José Vargas, una protesta por escrito.
El séptimo inning se fue rápido, y en la octava Jesse Chávez entró al
relevo por Tomateros y fue recibido con el segundo vuelacercas de
Valenzuela en el juego, pero ahora por el prado derecho.
Enseguida, López dio doblete, llegó a tercera en toque de bola y llegó
al plato con un sencillo de Leo Heras ante Oliver Pérez, quien el mismo
día acordó contrato de ligas menores con Marineros de Seattle. El batazo
cayó entre tres jugadores, y el jardinero derecho Frazier estuvo cerca
de atrapar la pelota al tirarse de cabeza.
En la novena, ya con el cubano Amaury Sanit en la loma, y ya con dos
outs, Brad Snyder pegó un infield hit por la intermedia y enseguida
Valenzuela dio doblete que lo mandó al plato. Tras un pasbol, López lo
mandó al plato con sencillo.
Alan Guerrero, quien sacó seis outs en fila con par de ponches, se llevó
la victoria, mientras que Sean Gleason compiló el rescate pese a que
Cervantes le abrió la entrada con doble. Sumó dos ponches, el último de
ellos ante el emergente Matt Esquivel para terminar el partido.
Sanit cargó con la derrota en una entrada un tercio, en que toleró tres hits y dos carreras limpias.
Esta es la segunda ocasión que Guasave llega a la final como mejor
perdedor de la repesca (comodín), y de nuevo lo hace con "Che" Reyes en
el timón, quien en 2005-06 perdió el título ante los Venados de
Mazatlán. Es la séptima ocasión que un comodín está en la final.
Los Algodoneros descansarán par de días y el sábado abrirán la Serie
Final ante los Yaquis de Ciudad Obregón. Los lanzadores probables son
Edgar González por Guasave y Luis Alonso Mendoza por los Yaquis.