miércoles, 1 de diciembre de 2010

"Me estoy preparando para ser abridor"

EL CARIBE
El pasado cuatro de septiembre, Jenrry Mejía tuvo su primera salida como abridor con los Mets, tras una larga estadía como relevista. Cinco entradas de ocho hits y cuatro carreras fue su carta de presentación en ese nuevo rol monticular.
Luego tuvo dos salidas más, de las cuales trabajó cuatro y dos y un tercio de entradas, actuaciones les sirvieron de plataforma para asumir ese rol a tiempo completo a partir del primero de abril del próximo año, fecha en que los Mets tendrán su primer enfrentamiento de la temporada ante los Marlins.


“En la actualidad me estoy preparando para ser abridor después de esa breve experiencia que tuve con el equipo este año”, dijo Mejía a El Caribe. “Me estoy reforzando más en esa parte para llegar aún mejor preparado a los campos de entrenamiento del equipo”, agregó.

Calificó de “gran prueba” su participación, a partir de este domingo, en la pelota otoño-invernal con los Tigres del Licey, pese a que solo tiene el permiso del conjunto de la Liga Nacional hasta finales de diciembre.

“Voy a lanzar con el Licey unas cuantas entradas para seguir preparándome y si Dios quiere llegar a los Mets como abridor. Me siento en óptimas condiciones para ocupar ese rol, pero si no sucede, a realizar el mismo trabajo como relevista”, indicó Mejía.

Negativo. Un desgarre en un músculo del hombro derecho llevó a Mejía perderse el resto de la temporada, situación de la que expresa se siente en franca mejoría. “Ahora mismo me siento bastante mejor. Anteriormente no me sentía muy bien, pero gracias a Dios que me siento bastante mejor.

He trabajado fuertemente, después de la lesión, de la cual me siento muy bien”, sostuvo el nativo de Azua.
Mejía finalizó la temporada de las Grandes Ligas con un récord negativo de 0-4 y un promedio de carreras limpias de 4.63 en 33 salidas con los Mets

Orgulloso de ser un dominicano más en las mayores
Debutar en las Grandes Ligas significó mucho para el joven lanzador de los Mets de Nueva York, ya que pudo convertirse en un dominicano que escribe su nombre en un listado del que muchos quieren estar.

“Eso fue algo grande, aunque para mi familia fue mucho mejor, debido a que parte de ellos comenzaron a llorar cuando me vieron por la televisión, aunque yo también boté mis lagrimitas.

Es un logro del cual uno se siente muy orgulloso y la familia más por el trabajo constante al que uno está sometido”, indicó Mejía, quien se preparara arduamente en el complejo del conjunto neoyorquino, ubicado en la comunidad de Jubey en Boca Chica.

Manifestó que la meta de todo jugador cuando está en las Menores, en especial dominicano, es poder llegar a las Grandes Ligas “y gracias le doy a Dios que pude cumplir con mi sueño. Me propuse esa meta y gracias a Él
la cumplí”.

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