Por Tuto Tavárez
En el capítulo 37 del Génesis, la Biblia nos narra la maravillosa historia de José y sus hermanos, quienes eran los hijos de Jacob. José era un joven de 16 años, pero de un comportamiento ejemplar y trabajador, mientras sus hermanos tenían mala reputación, pero no se dejó contagiar.
José hacía las cosas bien aunque nadie lo estuviera observando, porque él decía que no hacía las cosas para los hombres, sino para Dios.
Este preámbulo lo hago para caer en dos hechos que se han dado en las últimas visitas a Santiago de los Tigres del Licey y las Estrellas Orientales y donde sus jugadores y personal han dejado mucho que desear cuando están al amparo de las paredes del club house.
Tuve la oportunidad de asistir el viernes por la mañana al estadio Cibao, donde la noche anterior las Águilas Cibaeñas habían propinado una soberana paliza a los Tigres del Licey de 16 carreras por 3.
Naturalmente, con una asistencia tan grande había muchos desperdicios y basura en los pasillos, por lo que los hombres y mujeres encargado de la limpieza trabajaban fuertemente en la higienización de la instalación.
Pero insólitamente, el túnel que lleva al club house visitante, también estaba lleno de basura y había varios tanques para la colocación de los desperdicios virados, lo cual me llamó la atención y pregunté.
¨Eso fueron los jugadores del Licey después del juego de anoche¨, me respondió el señor Villamil, quien es una especie de utility en el estadio Cibao.
Asombrado volví a preguntar, buscando como respuesta una rectificación, pero lo que hubo fue una ratificación, aderezada con otra información que me dejó atónito: En la pasada visita de las Estrellas tomaron todos los rollos de papel y lo entraron por los hoyos de desagüe y taparon los sanitarios.
Estas bellaquerías fueron hechas por hombres profesionales, millonarios en dólares o pesos, con familia y que en su mayoría vienen de familiares con el mismo estatus social que los hombres y mujeres que tuvieron que recoger todo lo que ellos botaron.
Parece que el Licey es reiterativo en este tipo de comportamiento, sobre todo cuando viene a Santiago, pero sorprende que fuera cuando el campeonato apenas estaba por mitad, por lo que habría que preguntarse si sus acciones irían en aumento en caso de que vayan a ser descalificados.
En cuanto a las Estrellas, sabemos que en San Pedro de Macorís, los fanáticos son revoltosos, pero no que los jugadores también actuaran incorrectamente bajo la sombra de la noche. Sobre todo un equipo que se ha mantenido todo el torneo en los puestos 1 y 2.
La mayoría de jugadores latinos, deben la bonanza que hoy viven a un puertorriqueño llamado Roberto Clemente, quien siempre fue un defensor de nuestra gente, pero que dejó una frase lapidaria que debe ser copiada por nuestros peloteros: No basta con ser el mejor, hay que lucir como tal.
SQUEEZE PLAY: Elián Herrera, Rafael Ynoa, Mario Álvarez y Rafael Rijo, una cuarteta de los Dodgers de Los Ángeles, que contribuye al éxito de las Águilas Cibaeñas…La suerte que la segunda paliza de las Águilas a los Tigres fue en santo Domingo y no en Santiago…dice un lector que la actitud de los jugadores de los Tigres no está basada en su nombre, Tigres, sino en que cambiaron de marca…Por hoy, out 27.
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