Por Antonio Heredia.-
PUERTO PLATA.- Una bomba de tiempo que en cualquier momento pudiera colapsar y causar una tragedia de impredecibles dimensiones constituye el techo del pabellón de baloncesto Fabio Rafael González en el Complejo Deportivo general Gregorio Luperón de esta ciudad.
La mencionada estructura cuyas vigas y soportes metálicos están completamente corroídos por la acción degenerativa del salitre marino y los fuertes vientos del litoral atlántico, se encuentra a un tris de precipitarse al suelo, mientras aún se espera la promesa de su reparación por parte de las autoridades gubernamentales.
Esta peligrosa situación continúa latente a pesar de que dos titulares del Ministerio de Deportes y Recreación (MIDEREC), como es el caso del actual incumbente Danilo Díaz y su antecesor Jaime David Fernández Mirabal, inspeccionaron dicha problemática prometiendo actuar inmediatamente, pero de eso ya ha pasado mucho tiempo.
Dichas instalaciones construidas en el 1998 por el Estado, fueron golpeadas por los vientos destructivos de los huracanes Irma y María durante el paso cercano de ambos meteoros por las costa de Puerto Plata, siendo el lugar donde se realiza anualmente el torneo de baloncesto superior con refuerzos además es la sede del equipo Huracanes del Atlántico en la Liga Nacional de Baloncesto (LNB).
En tal sentido, el ex secretario de Estado de Obras Públicas y ex senador por Puerto Plata; ingeniero Miguel Ángel Jiménez Messón (Chío) se refirió a dicha situación en su cuenta de Facebook donde afirmó: “No deseo que se me catalogue de necio, pero mi responsabilidad profesional me obliga, por última vez, advertir el desastroso estado de la estructura de hierro del techo del polideportivo de Puerto Plata. Ojalá, no lleguen a decir...Chío lo advirtió”.
Y es que el bajo techo Fabio Rafael González, cada vez que llueve “el agua cae dentro y acampa fuera” como se estila a decir en el argot popular, hasta el punto de que la apertura de la serie final del presente torneo de baloncesto superior entre los equipos Cotorras del Gustavo y Sosúa Sharks, debió ser postergada por los aguaceros que se registran sobre esta provincia debido a dos vaguadas tropicales.
Numerosos deportistas y ciudadanos puertoplateños lamentan dicha realidad luego de tantas luchas que debieron librarse para que el Estado construyera el polideportivo general Gregorio Luperón en los terrenos donde estuvo el viejo estadio de béisbol Isabel de Torres, luego de que la dirigencia deportiva enfrentara y venciera ambiciones de grupos dominantes y políticos que pretendían utilizar los terrenos para un complejo habitacional.
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