martes, 11 de julio de 2017

Miguel Ángel Sanó se lució como subcampeón; Gary Sánchez calló bocas

MIAMI - Antes del Festival de Jonrones del 2017, celebrado el lunes en el Marlins Park como parte del 88 Juego de Estrellas, Miguel Ángel Sanó afirmó que su misión no era solamente disfrutar la competencia de cuadrangulares y compartir con sus colegas, sino ganar el certamen. El toletero dominicano de los Mellizos llegó cerca, pero al fin y al cabo nadie pudo vencer a Aaron Judge, la "bestia" de los Yankees que superó a Sanó en la ronda final por 11-10. "Nos fajamos ahí, hicimos lo más que pudimos", dijo Sanó. "Estuvo buena la competencia. Pienso que si puedo repetir (en el evento), puedo dar más jonrones". En total, Sanó conectó 32 bambinazos ante los envíos de su compatriota Fernando Tatis, ex ligamayorista que ha fungido como especie de mentor para el joven toletero. El batazo más largo de Sanó fue de 491 pies de distancia, en el espacioso estadio de los Peces.  En la primera ronda, Sanó derrotó a Mike Moustakas por 11-10 y en la segunda, eliminó a su compatriota Gary Sánchez por 11-10. Para Sanó, hubo un elemento de la jornada que se destacó en particular. "Competir con Aaron Judge, porque pienso que es un animal", dijo con una sonrisa el quisqueyano, quien llegó a la pausa del Juego de Estrellas con 21 estacazos. "Me siento contento, porque es un paso más en mi carrera, un logro. Espero tener otra oportunidad de volver a estar aquí". SÁNCHEZ CALLÓ MUCHAS BOCAS El dominicano Sánchez, receptor de los Yankees de Nueva York, se vio envuelto en una mini-controversia la semana pasada cuando Logan Morrison, autor de 24 cuadrangulares este año con los Rays, criticó la invitación del quisqueyano al Derby. Para Morrison, Sánchez era menos merecedor con 13 bambinazos en 57 partidos del 2017. Sin embargo, en la primera ronda, Sánchez, el octavo y último sembrado en la competencia, derrotó en la primera ronda a nada más y nada menos que Giancarlo Stanton, el primer sembrado y campeón defensor del evento que trataba de repetir la hazaña ante su fanaticada de los Marlins. Sánchez estropeó esa fiesta, superando por 17-16 a Stanton. "Me sentí bien de que pude pasar a la segunda ronda", expresó Sánchez. "Vine a divertirme y uno nunca sabe quién es el que gana, porque cuando uno sale al terreno, cualquiera puede ganar porque estamos bateando cuatro minutos toditos y creo que estamos iguales". Sánchez se voló la cerca 27 veces, siendo su batazo más largo de 485 pies. "Salí al terreno a tratar de levantar la bola y dar lo mejor de mí y me siento feliz", manifestó. 'Me siento feliz también porque mi compañero pudo llevarse la corona". Ese compañero de los Yankees, Judge-quien subió por el sistema de Nueva York junto a Sánchez--estuvo en boca de todos por su poder descomunal. Pero "El Juez" también se alegró de ver a Sánchez destacarse en la competencia. "Fue impresionante verlo dar uno tras otro", dijo Judge. "Pero he visto a Gary hacer eso durante muchos años. No me sorprendió mucho. "Fue hasta mejor verlo hacerlo en el gran escenario".

No hay comentarios.: