LOS ANGELES -- Aunque la selección de Holanda cayó el lunes en la primera semifinal del Clásico Mundial de Béisbol ante Puerto Rico, el mayor cañón de Países Bajos, Wladimir Balentien, tuvo un torneo para el recuerdo a nivel individual. El curazoleño terminó su participación como líder del evento en hits (16), jonrones (4), empujadas (12) y anotadas (10, empatado con Carlos Correa de P.R.). Entre los que llegaron a jugar al menos cuatro partidos en el torneo, "Coco" tuvo el mejor promedio con .615, el mejor porcentaje de embasarse con .677 y el OPS (porcentaje de embasarse más slugging) más destacado con 1.793. Definitivamente
, en sus siete partidos, Balentien puso de su parte para Holanda. "Mejor no se puede", dijo Balentien durante el Clásico acerca de su actuación individual en el torneo.  Balentien, de 32 años de edad, jugó partes de tres temporadas en Grandes Ligas con los Marineros y los Rojos entre el 2007 y el 2009. Pero aparte de algunos kilométricos jonrones, como un batazo de más de 500 pies vistiendo el uniforme de Cincinnati en el 2009, el toletero no se destacó mucho, bateando .221 con porcentaje de embasarse de .281 en un total de 70 partidos. Es en Japón donde Balentien ha sabido hacerse un nombre en el béisbol profesional. Desde el 2011, ha dado exactamente 31 cuadrangulares en cuatro de sus últimos cinco años completos con Yakult Swallows. En el otro, el 2013, el veterano puso una nueva marca en Japón para una campaña con 60 bambinazos, rompiendo el récord de 55 que había estado en manos de Sadaharu Oh, Tuffy Rhodes y el venezolano Alex Cabrera. "A veces en la vida uno no sabe dónde está la oportunidad", dijo Balentien. "(He tenido) unos años tremendos allá. Gracias a Dios tuve la oportunidad de empatar el récord y romperlo. Hasta el momento, me siento en casa allá". Viniendo de conectar la antes mencionada cantidad de 31 vuelacercas y empujar 96 vueltas por Yakult en el 2016, a Balentien le queda un año más de contrato con dicho club. Más allá del 2017, el oriundo de Willemstad no descarta otro esfuerzo por vestir un uniforme de Grandes Ligas. "Seguro que sí", dijo al ponérsele el tema. "Siento que todavía estoy joven, que todavía puedo jugar a ese nivel". En ese sentido, Balentien enseñó su poder en el Clásico, incluyendo un jonrón de 422 pies y con velocidad de salida de 111.1 millas por hora el lunes en la causa perdida ante Jorge López y la selección de Puerto Rico. "Espero que este Clásico abra algunas puertas para mí", expresó. "Quiero jugar mi año, terminarlo y a ver qué Dios tiene para mí".
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