Noel Algarin Martinez---
Guadalajara, México. El técnico de Puerto Rico, Flor Meléndez, se reafirmó ayer en que cualquier cosa que "no sea ganar el oro, es un fracaso" para su escuadra.
Por eso ganar el partido de ayer ante Canadá era tan importante, pues la victoria les abría las puertas a la semifinal del torneo de baloncesto de los XVI Juegos Panamericanos, y lo lograron de forma contundente al dominar a los canadienses vía paliza, 80-58.
El seleccionado patrio chocará hoy contra República Dominicana – ayer eliminó a uno de los favoritos, Brasil–, todo sujeto al resultado del partido que jugaron anoche, México y Argentina, por el último boleto a la semifinal. De haber ganado los mexicanos, los boricuas enfrentarían a Dominicana a la 1:00 de la tarde (2:00 p.m. de Puerto Rico). Si fue Argentina el que prevaleció, entonces enfrentarían a los estadounidenses en un horario por determinarse.
“Estamos donde quería estar todo el mundo, que era jugar la semifinal mañana (hoy)", dijo Meléndez tras el cómodo triunfo ante Canadá. “Desde antes de salir de Puerto Rico, yo dije que la meta era ganar el oro, y si no la ganamos, será un fracaso”.
Guiados por 25 puntos de José Juan Barea -su mejor partido del torneo hasta el momento-y una defensa férrea, Puerto Rico se repuso a la desconcertante derrota del jueves contra Argentina, 79-78.
“El equipo supo reponerse. Ayer (el jueves) en la derrota se aprendió mucho. Vi la reacción de mis jugadores, sus silencios, a ellos les dolió mucho perder, pero por eso salieron con otra actitud hoy (ayer)”, indicó Meléndez.
A juicio de Barea, quien además agarró tres rebotes y repartió tres asistencias en poco más de 25 minutos, Puerto Rico logró establecer un juego consistente en ambos extremos de la cancha.
“Fuimos consistentes en la defensa y si somos consistentes en la defensa los 40 minutos, la ofensiva llega”, expresó el base mayagüezano, quien dijo que su buen juego ayer respondió a que le bajó las revoluciones a las emociones.
“Estaba con más calma, cogí las cosas más suaves, los coaches me dijeron que me calmara un poquito”, relató Barea.
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