ALBERT PUJOLS ENCAJARÍA PERFECTAMENTE EN LOS DOGERS

Enrique Rojas ---

SAN LUIS -- La imagen misma es un verdadero poema: Albert Pujols vestido de blanco y azul, bateando cuarto --entre Matt Kemp y Andre Ethier-- contra Pittsburgh, el martes 10 de abril, en la apertura de los Dodgers de Los Ángeles en casa la próxima temporada.


Pujols, el mejor pelotero de la historia en los primeros 11 años de una carrera, será el agente libre más importante de la temporada muerta un par de días después que pase la Serie Mundial.

Para una gran mayoría de observadores, Pujols comenzará la próxima temporada en uniforme de los Cachorros de Chicago, el principal rival de los Cardenales; unos cuantos optimistas piensan que no saldrá de San Luis y unos pocos creemos que aterrizaría en un lugar neutral, como Los Angeles.

En lo que todos están de acuerdo es que el próximo contrato de Pujols será uno de los más importantes para toda la industria del béisbol. Desde que comenzó los entrenamientos primaverales sin un contrato que lo ate a San Luis más allá de noviembre del 2011, Pujols ha repetido las mismas palabras, que ya casi suenan a un mantra personal.

"Yo no estoy pensando en eso. Estoy pensando en ayudar este equipo a ganar", dijo Pujols a ESPNDeportesLosAngeles.comantes de que sus Cardenales saltaran al terreno para enfrentar a los Vigilantes de Texas en el Clásico de Otoño.

"Voy a tratar de hacer lo mejor posible para ayudar a los Cardenales a ganar la Serie Mundial. Para eso es que juegas, para estar aquí", apuntó el quisqueyano.

Debido a la situación gerencial que atraviesan los Dodgers, imaginarse que firmarán a Pujols o cualquiera de los otros grandes agentes libres que estarán disponibles en el mercado luce más como una químera que una posibilidad, especialmente cuando el futuro del conjunto está atado a la decisión de una corte de quiebra a finales de mes.

"En una situación normal, los Dodgers seguramente podría ir detrás de un gran agente libre, si no Pujols, quizás Prince Fielder u otro bateador de poder", dijo una fuente relacionada al equipo a ESPNDeportesLosAngeles.com. "Pero tenemos que ser realistas. Nadie sabe cuando los Dodgers estarán en una situación normal", agregó la fuente.

Para el 31 de octubre está programado que el atribulado propietario de los Dodgers, Frank McCourt, enfrente a las Grandes Ligas en una corte de quiebra. McCourt busca la aprobación de la venta de los derechos de televisión, que le darían el efectivo necesario para resolver asuntos urgentes, incluyendo el pago de $130 millones de dólares a su ex esposa, Jamie, como compensación para divorciarse. La oficina del comisionado sencillamente quiere que se autorice la venta del conjunto, lo que sacaría a McCourt del escenario en Chavez Ravine.

Ya sea con McCourt o cualquier otro cabecilla en la directiva, invertir el gran dinero que demandará Pujols en el mercado abierto, tendría más sentido para los Dodgers que para cualquier otro equipo de Grandes Ligas.

"Contar con un Pujols no solamente ayuda a un equipo, sino que incluso cambia la mentalidad de los contrarios, sabiendo la clase de pelotero, bateador y persona que es. Se siente extraordinario tener un hombre así", dijo el torpedero dominicano Rafael Furcal, quien llegó de los Dodgers a los Cardenales a finales de julio pasado.

"Es bueno tener un Albert Pujols, es el mejor del juego. Simple", dijo el relevista quisqueyano Octavio Dotel.

En el caso de los Dodgers, fichar a alguien como Pujols no solamente curaría algunas de las heridas causadas por el "McCourtGate", sino que también limpiaria un poco del tizne que el escándalo ha echado sobre el anteriormente inmaculado nombre de la franquicia.

De paso, Pujols daría a los Dodgers su mayor figura desde que el receptor Mike Piazza fue infaustamente cambiado a Florida en mayo del 2010. Un puesto que ocupó momentáneamente el extravagante Manny Ramírez.

Contrario a Ramírez, quien fue cambiado por Boston a Los Ángeles cuando ya tenía 36 años de edad, Pujols será agente libre antes de cumplir los 32 años. El 1B seguramente no tendrá otros 11 años parecidos a los primeros, pero tomando en cuenta su dedicación casi monástica, pelear el Jugador Más Valioso por tres o cuatro años más no es algo impensable.

En su legendaria carrera, Pujols batea .328 con 445 jonrones y 1,329 carreras impulsadas; tres premios de Jugador Más Valioso, nueve visitas al Juego de Estrellas y dos Guantes de Oro. Ha jugado tres veces en la Serie Mundial y batea .339 con 15 jonrones y 46 impulsadas en postemporada.

"Lo dije tras su año de novato, es el mejor pelotero que he visto, y eso fue hace 10 años", dijo Tony La Russa, el dirigente de Pujols durante toda su carrera. "Me cuesta describir la clase de privilegio que ha sido admirar a este hombre durante 11 años, cómo se desempeña dentro y fuera del terreno", agregó el capataz de los Cardenales.

Soñemos por un momento que una corte, en lugar de resolver una disputa entre McCourt y las Grandes Ligas, falla a favor de restaurar el orden en Dodger Stadium y que dentro del plan de reconquistar a los aficionados y la tradición ganadora se incluye fichar una estrella de alto calibre y trayectoria inmaculada. Bajo esas premisas, nadie encajaría mejor en Los Ángeles que Albert Pujols.