Francisco se considera un tipo ‘chévere’ y queda mucho de sí

SANTO DOMINGO  (Licey.com).- Sorprendido por alguna pregunta que no se esperaba, Juan Francisco suele sonreír para autoproclamarse como un tipo ‘chévere’, no ‘odioso’, normal, que viene batallando con las turbulencias para intentar aportar lo mejor de sí, dar la corona que la fanaticada de los Tigres del Licey se merece. Entiende que siempre habrá críticas, buenas y malas, pero no le ‘para’ mucho a las redes sociales, porque hay quienes no le dan el uso correcto y trata de desenfocarse de las cosas malas que llegan a su mente y dar siempre lo mejor de sí, aparte de entender, que queda mucho de sí, dentro del béisbol De estas cosas habló “El Caballo Azul”, el rey de los jonrones por vida (69) de la liga de béisbol otoño invernal dominicana, en una entrevista con Juan Nova Jr. Señala que desde los entrenamientos pretemporada trata de hacer ajustes para tener un buen comienzo. Unos ajustes que intenta hacer juego a juego, pitcheo a pitcheo y que entiende le han ayudado, también con el apoyo de sus compañeros, jugadores y coaches, quienes le observan y aconsejan sobre las pequeñas cosas que puedan ayudarle, pero siempre trabajando fuerte para salir adelante. Confiesa que ha pasado por muchas turbulencias, “momentos buenos y malos” en su intento por tener un buena temporada; que trata de afrontar los momentos malos cuando se presenten, salir y aprender de ellos y seguir trabajando fuerte para dar el 100 por ciento. Un aspecto en el que Francisco ha sorprendido a no pocos, es en la defensa de la primera base. Afirma que es resultado de los ajustes que hizo en la temporada muerta, “y las cosas se están notando un poco”. Del trauma que suelen provocar las críticas de los fanáticos y cómo lidiar con ellas, Juan parece tomar y dejar. “Siempre va a haber muchas críticas, sean buenas o malas”, y trata de desenfocarse de algunas cosas que llegan a su mente y no llevarse de comentarios negativos, “siempre coger lo bueno”. “Las redes no las usamos para lo que se debe, sino en otro tipo de cosas. Yo no le paro mucho a redes, trato de hacer lo que uno entiende que tenga que hacer en el juego, en el terreno, y olvidarme de eso”, agrega. El entrevistador le afirma que es muy querido, y por tal, también están los que les adversan, que suele suceder porque se ha convertido en un liceísta al 100 por ciento. “Somos todos de sangre azul”, responde Francisco después de exhalar una sonrisa de sorpresa por la afirmación del periodista. Entiende que si es querido, es por lo que ha hecho en el diamante y cómo se ha manejado, “el tipo de persona que soy”, que ha ido por buen camino. Juan Francisco señala que hay que hacerle entender al mundo que hay momentos buenos y malos, pero trata de hacer bien las cosas, cumplir los compromisos para estar orgulloso de sí, tratando siempre de dar lo mejor “y que la gente entienda a uno”. -La prensa entiende que eres ‘odioso’, de poco hablar, que no te gusta dar muchas declaraciones”, le espeta Nova Jr. “No soy odioso, soy una persona ‘chévere’, dominicanamente hablando”, se define. “Lo que pasa es, que no me gusta mucho lo de la cámara…, a veces interpretan la manera que no es, pero todo el que me conoce realmente sabe cómo yo soy, que soy chévere”. -¿Eres tímido?, le suelta. “No, normal”, responde medio sorprendido. Sobre cómo lidiar con las altas y bajas en que se sumerge, dice que siempre hay que mejorar, que son cosas que pasan en el béisbol, cuando no se empieza la temporada como pensaba, pero que intenta dar el todo por el todo para tratar de terminar, “no como comenzamos y terminar fuerte”. Asegura que en el Licey hay bastante ánimo, tratando de unir la ofensiva con la defensa y el pitcheo, trabajando en conjunto y que intentan aportar todos un poquito de arena. “Creo que las cosas van a salir a flote, como todos esperamos”. Su meta es, afirma, “como siempre, salir a dar todo por el todo y obtener la corona que tanto se merece esta fanaticada”; dar lo mejor “y aportar al equipo cuando me necesiten”. -¿Hay Juan Francisco por mucho tiempo?, se le indaga. “Todavía queda mucho de mí, vamos a seguir trabajando, dando lo mejor y que cada vez que salga al terreno, la gente pueda ver los resultados.”, terminó un Francisco ecuánime.