Por: Manuel Frías
Rep. Dom.
El convenio laboral entre la MLB y la Unión de Peloteros aun no se ha firmado y ya Latinoamérica independientemente del resultado final, ya puede respirar.
En las negociaciones del pasado fin de semana, los dueños aceptarón no implementar el Draft Internacional buscando que la MLBPA firme el nuevo acuerdo laboral que debería entrar en vigencia el próximo 1ro de diciembre, luego que el actual CBA (Por sus siglas en ingles) concluya en esa misma fecha.
Sentimientos de alegría, regocijo y alivio alrededor de toda latinoamérica se ha hecho sentir producto de esta decisión tomada por los dueños de los equipos; ya que para muchos con la implementación del draft, la participación latina bajaría considerablemente. Pero también está la gran inversión que grupos (Scouts Independientes) han hecho en habilitar espacios para el desarrollo de jóvenes que buscan salir de la pobreza que los embarga. Academias y complejos deportivos dedicados a la captación y posteriormente preparación de estos jóvenes, son muy comunes en gran parte de Latinoamérica y ya este sistema es una industria que maneja más de 25 millones de dólares anuales, los cuales llegan a familias empobrecidas de nuestros países hermanos.
Sin embargo esta la duda del proceso actual, el cual está lleno de corrupción por parte de algunos que manejan el sistema en combinación con representantes de los equipos, más la falta de educación de quienes dejan sus familias en busca de un mejor mañana y la compra de jóvenes a pequeñas ligas que oscilan entre los 12, 13 y 14 años de edad. También está la trata de personas, que permite que scouts viajen a Cuba y ofrezcan a los peloteros locales las facilidades de firmas y estos tengan que salir en una pobre embarcación (Yola), en busca de un mejor futuro arriesgando hasta su propia vida.
Esperemos que el nuevo convenio laboral regules la gran parte de los defectos del sistema actual, permitiendo que jóvenes educados lleguen al mejor béisbol del mundo y que también, les permita ejercer otras profesiones en caso de que no logren su cometido.
Es un paso muy importante para Latinoamérica, pero no debemos dormirnos en los laureles de la ignorancia; que por la ambición económica estamos perdiendo jóvenes profesionales producto del analfabetismo que provoca dejar los estudios por salir en busca de ese gran sueño americano.
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