ALEXANDER GOMEZ...SANTO DOMINGO (Licey.com).- Cuando el equipo del Licey está en armonía, siempre las cosas salen bien y de ahí los resultados en los últimos cuatro partidos.
El razonamiento lo hizo el segunda base Jordany
Valdespín, quien bateó doble y sencillo en la masacre 14-4 del martes ante su
“eterno rival”, Leones del Escogido.
Sobre el plan de los Tigres frente al veterano y
hasta entonces dominante lanzador, Nelson Figueroa, dijo que fue tratar de
verle la bola y atacarlo sobre la zona de strikes.
“Él cayó abajo, lo atacamos y lo pudimos sacar
temprano del juego y he ahí el resultado”, expresó en entrevista para
Licey.com, luego del partido en el que Figueroa no sobrevivió tres entradas
(2.1), le pegaron nueve hits y cinco carreras limpias.
Expuso que si el Licey puede hacer siempre como
resultó contra Figueroa, que es atacar al pitcher rival primero, entonces
pondrá la presión al contrario, tal como pasó con el Escogido, el que no pudo
acercarse mucho en el resultado.
Al hablar de la diferencia de un Licey rezagado al
principio del round robin, que incluyó cuatro reveses al hilo, y el de los
últimos cuatro juegos, ganados todos, la atribuyó a “cosas del béisbol”, en el que
nunca hay nada escrito.
“Había unas cuantas cositas que no mandaban, pero
ahora las cosas se han nivelado, estamos en el segundo lugar y vamos a seguir
adelante”, dijo.
Agregó que faltan algunos juegos “que necesitamos
ganarlos” y con la ayuda de Dios y el equipo unido como una familia, como
siempre han sido los Tigres del Licey, y de ahí los resultados.
Recomendó a la fanaticada azul continuar el
respaldo al conjunto, asistiendo al estadio, ya que con su presencia los
jugadores es que se motivan.
“Cuando vemos el play lleno, nos motivamos
mucho y damos el cien por ciento cada día… y
los nueve jugadores que entramos al terreno nos entregamos como si fuera el
último partido de la serie final”, concluyó Valdespín, quien anotó dos carreras
y anotó una en el encuentro ante los escarlatas.
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