España pasó por encima de Australia en el último partido de preparación de la selección antes del Europeo, al derrotarles por 97-58. La Fonteta estaba repleta hasta los topes y el público absolutamente entregado. Antes del partido, Vicente Solá presidente del Valencia Basket recibió de manos del presidente de la FEB una placa conmemorativa y durante el encuentro se sucedieron diversos actos de homenaje más.
El primer cuarto estuvo marcado por una fuerte defensa de la selección, dejando a los australianos en 18 puntos y yéndose los nuestros hasta los 34. En los primeros momentos se vio como Calderón y Marc intentaban conectar, pero el que acabó sacando provecho de esas acciones fue el mayor de los Gasol, haciendo un par de canastas fáciles al capturar sendos rechaces. Gracias a una buena defensa individual y a la presión que ésta provocaba en los australianos, la línea exterior formada por Calderón-Rudy-Navarro fue capaz de realizar robos que en ocasiones permitieron a los nuestros correr y anotar con facilidad, de ese modo aparecieron las primeras ventajas con un marcador favorable para la selección de 11-5.
Después de un intercambio de triples entre Navarro y Mills, y del primer tiempo muerto, no cambió la tónica de estos primeros minutos. Siguieron los robos de la selección y el único que parecía capaz de ofrecer algo por los australianos era su base titular, que seguía jugando desde más allá de la línea del triple, pero sus esfuerzos fueron en vano ante una avalancha de triples -hasta 6 en el primer cuarto- de Rudy, Navarro y Marc.
Aprovechando la situación y las facilidades que estaba proporcionando el rival, la afición comenzó a solicitar la entrada del ídolo local, deseo que Scariolo no tardó en satisfacerdando entrada a Claver y Ricky por Marc y Calderón, para poco después dar entrada al resto de componentes de la segunda unidad para finalizar el primer cuarto con un triple de San Emeterio sobre la bocina.
Con la segunda unidad en pista durante el inicio del segundo cuarto, se mantuvieron las distancias aunque se vio a una España un poco más fallona y con menos presencia interior, algo que aprovechó de nuevo Mills en los primeros instantes para seguir atacando el aro español, ayudado durante los primeros compases de este segundo periodo por Baynes. Aunque la ventaja de la selección no peligró en ningún momento, un tiempo muerto y un espectacular contraataque culminado por Ibaka con asistencia de Claver devolvió las sensaciones momentáneamente a los nuestros.
A pesar de ello seguían las imprecisiones, lo que llevó a Scariolo a dar entrada a Sada y a Marc para intentar corregirlas y cerrar un rebote que estaba siendo controlado en este periodo por los australianos.
El cambio de dirección y la reforzada presencia interior hizo, ahora sí, resurgir definitivamente a la selección, sobre todo gracias a acciones en ambos lados de la pista de la fuerza de la naturaleza que es Serge Ibaka. Australia intentó no darse por vencida con un par de robos y canastas consecutivas, pero Marc contestó de nuevo con un mate, dando por zanjado el intento de reacción. Un triple de Navarro a falta de 7 segundos, dejaba intacta la ventaja de la selección y un marcado de 53-37 al descanso.
El tercer cuarto trajo consigo el regreso del quinteto inicial a la pista. Dos buenas defensas y la incesante lluvia de triples, esta vez de Calderón y Pau, llevó a los nuestros a conseguir mayores diferencias. Pero esta vez Australia parecía dispuesta a plantear más problemas y de la mano de sus interiores, Nielsen, Ingles y principalmente de un inspirado Baynes estaban dispuestos a hacer algo más que mantener el tipo, haciendo que la selección que había empezado este cuarto en zona, tuviera que volver a la defensa individual que les había funcionado hasta el momento.Pero ni su mejorado ataque, ni la agresividad en defensa del suplente de Mills, Dellavedova, fueron suficientes para detener al rodillo español y más teniendo en cuenta que el juego interior de Australia aunque voluntarioso, no podía detener a ninguno de nuestros pívots. Un señorial Pau, acompañado por su hermano Marc, lideraron una vez más a los nuestros en ataque, yéndose el mayor de los Gasol al banquillo de forma definitiva con 17 puntos y haciendo que la selección llegara al último cuarto con una ventaja de 20 puntos.
El último periodo permitió constatar que el “fichaje” de Ibaka va a dar muchas alegrías a los nuestros, con acciones espectaculares a ambos lados de la cancha hizo que la afición enloqueciera y se implicara en un partido que llevaba ya muchos minutos decidido. Ya fuera con un mate, un tiro de 4 metros, 2 tapones casi consecutivos… él sólo hizo que toda la Fonteta se pusiera en pie y permitió que otros jugadores que lo necesitaban entraran un poco más en el partido, de ese modo Claver o Llull, que habían tenido actuaciones más discretas, se unieron a la fiesta, con dos contraataques consecutivos acabados de manera brillante.
Mientras el partido entraba en esa especie de bendita locura, la diferencia en el marcador seguía creciendo constantemente para culminar con un 97-58 y buenas sensaciones de cara al Eurobasket que comienza esta semana.
España (97): Calderón (5), Navarro (11), Rudy (6), Pau (17), Marc (14) -cinco inicial- Claver (7), Ricky (3), San Emeterio (11), Llull (7), Ibaka (14), Sada (2).
Australia (58): Mills (17), Ingles (7), Barlow (4), Nielsen (4), Ogilvy (7) -cinco inicial- Martin (-), Gibson (-), Dellavedova (6), Worthington (-), Baynes (11), Kickert (2), Crawford (-).
No hay comentarios.:
Publicar un comentario