HOY.COM.DO
Fracasos. Jugadores importados que han tenido grandes carreras en las mayores, han pasado por el béisbol invernal dominicano y han defraudado tanto a sus equipos como a los fanáticos
BISMARCK GONZÁLEZ
A lo largo de toda la historia del béisbol invernal dominicano, numerosos han sido los casos de jugadores que han tenido carreras destacadas en Grandes Ligas pero que han fracasado en su paso por nuestra pelota local.
El caso más reciente es el de Andruw Jones, quien hasta el momento ha tenido una participación con las Aguilas Cibaeñas digna de ser puesta en el olvido. Hasta el partido del viernes, Jones había conectado apenas un imparable en 11 turnos al bate durante el Todos contra Todos, acumulando un pírrico promedio de .091. Durante la serie regular la historia no fue muy diferente, pues el jardinero pudo conectar apenas tres imparables en 16 viajes al plato para acumular average de .188.
Estos números son de un jugador que en 13 temporadas en las mayores ha participado en seis Juegos de Estrellas, y que hace apenas dos años conectó 41 jonrones y remolcó 129 carreras para los Bravos de Atlanta.
Jones vino a jugar por las Aguilas con la intención de reencontrarse con su swing, pero eso es lo menos que ha logrado. Ni siquiera se ha lucido en la defensa, que ha sido el fuerte de su carrera tras acumular diez Guantes de Oro en las mayores.
Pero el caso de Jones no es el único en su clase. Otros jugadores de Grandes Ligas se han quedado cortos en nuestra pelota, luego de que se crearan grandes expectativas alrededor de ellos a su llegada al país.
Bob Gibson: El lanzador tuvo una brillante carrera de 17 años con los Cardenales de San Luis en las mayores que le mereció su exaltación al Salón de la Fama, pero en la pelota dominicana tuvo marca de apenas 2-8 y efectividad de 5.00 con los Tigres del Licey durante la temporada de 1958-59.
Tony Oliva: Durante la temporada de 1967-68 tuvo promedio de .259 con las Aguilas, no conectó jonrón y remolcó apenas tres vueltas. Sin embargo bateó para .304 y remolcó 647 vueltas en 15 campañas con los Mellizos de Minnesota en las mayores.
Jack Clark: En 18 campañas militando con cinco equipos de las mayores, terminó con promedio de por vida de .267 con 340 jonrones y 1,180 remolcadas, pero bateó apenas para .200 con el Escogido en 1976-77, no pegó jonrones y remolcó una sola carrera.
Dave Stewart: Durante su carrera de 16 temporadas con cinco equipos diferentes en las mayores, el lanzador tuvo marca de 168-129 y efectividad de por vida de 3.95. Sin embargo cuando jugó con el Licey en 1981-82, terminó con cuatro derrotas sin triunfos aunque tuvo efectividad de 3.96.
Lenny Dykstra: Durante la campaña de 1985-86 tuvo promedio de .217 con los Toros en la pelota dominicana, pero tuvo una gran carrera de 12 años en las mayores dividida entre los Metros de Nueva York y Filis de Filadelfia en la que tuvo promedio de .285 con 802 vueltas anotadas y 404 empujadas.
Mark McGwire: Militó con el Licey en 1986-87 y conectó ocho hits en 47 turnos para acumular promedio de .170. En las mayores tuvo una brillante carrera, conectando 583 jonrones de por vida con 1,414 remolcadas entre los Atléticos de Oakland y los Cardenales de San Luis.
Rondell White: Con el Escogido tuvo promedio de .133 en 1994-95, sin jonrones ni remolcadas. En 15 temporadas con siete equipos en las mayores, tuvo promedio de .284 con 198 cuadrangulares y 768 remolcadas a lo largo de su carrera.
El protagonista
Andruw Jones
Jardinero Central
Decepción. El jugador ha defraudado por completo tanto a la fanaticada como a la gerencia de las Aguilas, pues hasta el partido del viernes apenas había conectado cuatro imparables desde que llegó al país. Vino a la República Dominicana con la intención de trabajar en su bateo, que estuvo muy pobre durante la temporada del 2008 con los Dodgers en las mayores, sin embargo aún no ha podido encontrar el ritmo que le llevó a conectar 51 jonrones en el 2005 y otros 41 en el 2006 con los Bravos de Atlanta.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario