Es la segunda vez en la historia que un combinado tricolor acudirá a un certamen mundialista.
La primera ocasión que eso sucedió fue en el 1978 en Manila, Filipina, evento en el que la tropa local culminó en el décimo segundo puesto. Las selecciones de Puerto Rico, Argentina y México también avanzaron a España 2014.
Ahora los criollos, que clasificaron en en la segunda posición con marca de 6-2 (12 pts), discutirán mañana a las 5:30 p.m. con los boricuas el derecho a pelear por el oro y después los aztecas jugarán frente a los argentinos. La de ayer se trató de la quinta victoria en fila del combinado local, cuya participación en la primera ronda tuvo un sabor agridulce tras dos reveses seguidos.
Jack Michael inmenso
“¡Lo logramos! ¡lo hicimos!”, exclamó al portal de basketdominicano.com Jack Michael Martínez, quien no pudo contener sus lágrimas al final del encuentro. “No pude aguantar, esto es demasiado grande, lo mejor que le ha pasado a mi carrera hasta ahora.
¿Un Mundial con este equipo? dónde nadie creía”. Martínez otra vez salió desde el banco para liderar al equipo dominicano, que fiel a los últimos cinco encuentros, rotó el balón como los mejores y empleó una defensa impenetrable. El capitán ayudó con 17 puntos y 10 rebotes.
“Estuvimos unidos siempre. Cada quien vio las fortalezas y debilidades de nosotros”, agregó. “Nos sacrificamos para ayudar al equipo, fortalecer la banca, dar más profundidad y pudimos jugar en conjunto, algo que hacía muchísimos años no se veía en la selección”, expuso.
Además de Martínez, ante Uruguay otros cuatro jugadores terminaron con cifras dobles en anotación, incluido James Feldeine, quien apenas hizo siete disparos y concluyó con 14 unidades. Francisco García, Eloy Vargas y Eulis Báez aportaron 13 unidades cada uno.
Uruguay, que ya estaba descalificado, ofreció resistencia todo el camino y no fue hasta que Feldeine encestó un triple que puso el encuentro 73-67 con 3:41 por jugar del último parcial cuando el partido empezó a lucir a favor de los quisqueyanos.
Con 2:23 el propio Feldeine completó una asistencia de Báez y colocó la pizarra 75-68 con una canasta en bandeja, mientras que finalmente Báez encestó un triple que terminó con todas las aspiraciones uruguayos al poner el partido 78-68 con 1:55 para el final del tiempo reglamentario.
República Dominicana lanzó para 49% desde el campo, 40 en triples (20-8) y 74 en tiros libres (27-20). Dominaron los rebotes 36-30 y además lograron 14 asistencias y ocho robos. La mayor cantidad de asistencias de los criollos en este evento fueron 15 ante Jamaica el pasado jueves, precisamente el partido que mostró mejoría total para una tricolor que se fue invicta en esta ronda (4-0), incluida otra victoria ante Puerto Rico el pasado sábado y otra sobre Canadá, el domingo.
El ex NBA Esteban Batista encabezó a la escuadra sudamericana con 21 puntos y 13 rebotes, mientras que Leandro García Morales tuvo 16 y cuatro asistencias para Uruguay, que se quedó con marca de 1-6. “Poner en palabras lo que siento se me hace difícil”, dijo Báez a través de una nota que envió el equipo nacional. “En el vestuario hubo lágrimas de la emoción y ver a mi capitán (Jack Michael Martínez) llorando luego de tanto tiempo intentando esto es impresionante”, agregó. l
Testigo de la historia
La selección nacional de baloncesto sencillamente no dejó escapar su gran oportunidad de ir a un Mundial. Siempre vi a Caracas como un paraíso para clasificar, pero lo que ese equipo consiguió va mucho más allá de obtener un boleto a España 2014.
Para mí, aquí lo destacable no fue atrapar ese ticket, sino la forma cómo se obtuvo.
Me parece que esta lección de baloncesto que acaba de dar la tropa quisqueyana jamás será olvidada por los que siguieron paso a paso el desempeño de este equipo. Es un honor que nos confirieron y le estaremos agradecidos siempre.
Caracas será recordada como el lugar donde los jugadores criollos dieron el gran paso definitivo hacia la transacción de un baloncesto de élite mundialista. Como la ciudad donde finalmente se exorcizaron los egos individuales y engrandeció el espíritu colectivo, que es de lo que se trata el baloncesto.
Nunca en la historia se había visto un equipo como ese, con ese don de recuperarse de las adversidades como un gran gigante, con tanta honra y con sobrada entrega.
Estoy seguro, de acuerdo con lo que se vio en Venezuela, no tendremos que esperar otros 35 años para ver a un conjunto nuestro en un Mundial. Eso, mis queridos y queridas, nos hace privilegiados.
Najri dice que la meta es la medalla de oro
CARACAS. República Dominicana no se detiene. Después de asegurar este domingo su pase a las semifinales del Campeonato FIBA Américas 2013 y su clasificación al Mundial 2014, el gerente de la selección, Eduardo Najri, indicó que el equipo le apunta a la medalla de oro. “Aquí no le tenemos miedo a nadie. Hemos demostrado que podemos ganarle a cualquiera. La meta es ganar oro”, dijo Najri. Sobre los logros del conjunto, el ejecutivo dio importancia a lo bien que se ajustaron sus muchachos al sistema de Orlando Antigua. “Creyeron en él y dejaron atrás los individualismos. Tomó dos derrotas agrias para entenderlo, pero cuando ese equipo decidió unirse han llegado cinco victorias consecutivas”, comentó. Najri también se volcó en elogios para Jack Michael Martínez. “Otra vez estuvo espectacular”.
“Los jugadores confiaron en mis planteamientos”
CARACAS. Gran satisfacción mostró en la rueda de prensa el dirigente de República Dominicana, Orlando Antigua, por la clasificación de su equipo al Mundial del próximo año que se celebrará en España. “Pudimos cumplir con la meta de terminar entre los primeros cuatro de este evento”, expresó Antigua, según una nota de prensa remitida por la selección nacional. “A los 12 jugadores les agradezco más todavía porque confiaron en mis planteamientos y los ejecutaron. No hay palabras para describir lo orgulloso que eso me hace sentir”, siguió diciendo.
Antigua también aprovechó la oportunidad para destacar que el equipo caribeño clasificó porque decidió que ya era tiempo de que el baloncesto dominicano sea reconocido mundialmente.
“Ellos decidieron dejar atrás todo lo sucedido en el pasado y jugar en equipo. Eso es admirable”, comentó el antiguo miembro del equipo tricolor.
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