Por Reiner Izturriaga...Cocodrilos de
Caracas vio cortada su racha de cinco finales disputadas tras la
eliminación ante Marinos de Anzoátegui al caer en la semifinal 1-4. La
derrota obligará al equipo saurio a tener que hacer una revisión en su
estructura, según explicó el gerente Rostin González.
“Había optimismo por parte de la directiva para remontar la serie, no se pudo, y vendrán algunos correctivos. No vamos a activar las alarmas tampoco. Estuvimos entre los mejores cuatro del torneo, pero con un poco más de acople se pudo haber llegado más lejos. Vamos a analizarnos y a corregir los errores”, indicó González.
Si bien Cocodrilos había disputado cinco instancias decisivas de manera consecutiva entre 2007 y 2011, solo pudo ganar dos (2008 y 2010).
En el aspecto individual, el entrenador Néstor Salazar, de sus 10 finales dirigidas en total (las últimas siete al hilo), apenas consiguió sus dos coronas con los capitalinos, lo que demuestra que en las series decisivas no ha podido rendir de la misma manera que lo ha hecho en ronda regular.
“Tenemos que ver a fondo la situación”, insistió el directivo. “No se le puede echar la culpa a Néstor Salazar ni a tal o cual jugador”, añadió.
Con respecto al aporte de los importados Jack Martínez y Leandro García Morales, quienes no se vieron tan efectivos como en años anteriores, sobre todo a la hora de la chiquita, González manifestó: “Si en este momento tendría que decidir, repito con mis hombres. Jack y Leandro son unos caballos, al igual que Carl Elliott. La gente critica y dice que debimos tener a un importado en la reserva, no soy dado a esa idea, creo que el que hace eso es porque tiene una duda tremenda, y yo no tenía duda de mis importados”.
Para el directivo, la semifinal ante Marinos se escapó al perder el primer juego en casa, después de estar ganando por 19 puntos en el último cuarto.
“Estábamos obligados a ganarlos todos luego de no poder ganar en Puerto La Cruz, y no se pudo. Eso pasó factura. La cosa era difícil, estamos hablando de Marinos”.
“Había optimismo por parte de la directiva para remontar la serie, no se pudo, y vendrán algunos correctivos. No vamos a activar las alarmas tampoco. Estuvimos entre los mejores cuatro del torneo, pero con un poco más de acople se pudo haber llegado más lejos. Vamos a analizarnos y a corregir los errores”, indicó González.
Si bien Cocodrilos había disputado cinco instancias decisivas de manera consecutiva entre 2007 y 2011, solo pudo ganar dos (2008 y 2010).
En el aspecto individual, el entrenador Néstor Salazar, de sus 10 finales dirigidas en total (las últimas siete al hilo), apenas consiguió sus dos coronas con los capitalinos, lo que demuestra que en las series decisivas no ha podido rendir de la misma manera que lo ha hecho en ronda regular.
“Tenemos que ver a fondo la situación”, insistió el directivo. “No se le puede echar la culpa a Néstor Salazar ni a tal o cual jugador”, añadió.
Con respecto al aporte de los importados Jack Martínez y Leandro García Morales, quienes no se vieron tan efectivos como en años anteriores, sobre todo a la hora de la chiquita, González manifestó: “Si en este momento tendría que decidir, repito con mis hombres. Jack y Leandro son unos caballos, al igual que Carl Elliott. La gente critica y dice que debimos tener a un importado en la reserva, no soy dado a esa idea, creo que el que hace eso es porque tiene una duda tremenda, y yo no tenía duda de mis importados”.
Para el directivo, la semifinal ante Marinos se escapó al perder el primer juego en casa, después de estar ganando por 19 puntos en el último cuarto.
“Estábamos obligados a ganarlos todos luego de no poder ganar en Puerto La Cruz, y no se pudo. Eso pasó factura. La cosa era difícil, estamos hablando de Marinos”.
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